C.N. Helios - 1 : U.D. Montecarlo - 1

Precioso partido el que nos han regalado los chicos de ambos conjuntos para terminar el año, pleno de esfuerzo, sacrificio y buen fútbol en muchos momentos y en el que la U.D. Montecarlo mereció mucho más que su rival gracias a un gran segundo tiempo en el que se mostró muy superior y gozó de un buen puñado de ocasiones de gol. 

La primera mitad comenzó sin un claro dominador y sin apenas aproximaciones en ninguna de las dos áreas, si bien parecía un poco más cómodo el cuadro local; sin embargo, fiel a su cita con el gol, la delantera rojilla  aprovechó  la primera ocasión que tuvo para hacer el 0-1 sobre el minuto 10 tras una indecisión de la zaga local. Intentó reaccionar el cuadro local pero las defensas se mantenían firmes, hasta que en un lanzamiento de falta a los 16 minutos y tras un mal entendido entre el portero y un defensa visitante el balón acabó introducido por un delantero local en la red en lo que supuso el 1-1. 

Continuó el partido sin dominio por ninguno de los dos conjuntos, y sin ocasiones, reseñar tan sólo un disparo visitante que salió junto a la palo de la portería azulona. 

En la segunda mitad todo iba a cambiar y lo haría pronto ya que a los 4 minutos de la reanudación, tras un centro desde la derecha un delantero heliófilo remata a bocajarro obligando a realizar una gran intervención al portero rojillo. Esta clara ocasión local pareció despertar al cuadro de torrero que respondió sólo unos instantes después con una clarísima ocasión que es detenida por el portero local, y antes del minuto 10 de nuevo una doble ocasión visitante que primero dio en el palo, con ayuda del guardameta para el posterior remate salir fuera con toda la portería a favor. Ya no darían tregua los visitantes y se hicieron de manera clara con el control del partido, ganándole la partida por completo a su rival y realizando un buen juego que sin duda mereció mayor premio; a los 20 minutos de esta segunda mitad, tal vez en la mejor jugada del encuentro con una preciosa triangulación de varios jugadores del Montecarlo terminó con un balón en el corazón del área que ante la salida del portero local el delantero rojillo lanzó fuera cuando ya se cantaba el gol. Tras varios momentos de acoso visitante donde se rondó el gol, salió el cuadro azulón y se acercó a la meta de los de torrero forzando una falta lateral en la que disfrutó de su última ocasión en un remate de cabeza que salió fuera por poco. 

Volvió a tomar el control el Montecarlo que ya no cedería hasta el final y llegaron nuevas ocasiones como un balón que no acierta a rematar en el área pequeña un jugador visitante, u otro por la izquierda que cuando ya se disponía a rematar a bocajarro metió la puntera el defensor del Helios. Así llegamos a los 5 últimos minutos con dominio visitante pero con el resultado de empate a 1 en el marcador, y de una galopada de su delantero cortada en falta por el defensor local, nació la última gran ocasión del partido para los rojillos, en el lanzamiento de la falta a la que respondió el portero local con una gran estirada enviando el balón a córner cuando ya se colaba junto a la cepa del poste. Aún lo intentarían los visitantes en una par de ocasiones más, pero el marcador ya no se movería. 

Injusto resultado para el cuadro de torrero que mereció más y que realizó una segunda mitad digna de elogio, superando por completo a su rival, pero hoy el balón no quiso entrar.

La puyita de alasan: Debo reconocer que he disfrutado esta jornada con el juego del equipo, a pesar del resultado que no ha sido todo lo favorable que debería teniendo en cuenta los méritos acumulados por ambos conjuntos, pero creo sinceramente que hemos hecho uno de los mejores encuentros de la temporada sobre todo en la segunda mitad, y lo hemos hecho ante uno de los gallitos de la liga. Se demuestra que este equipo tiene mimbres suficientes para jugar bien al fútbol , lo que unido a la entrega y la intensidad ya demostrada nos hace aún más fuertes.
Pero no voy a dejar pasar la última oportunidad del año sin clavar mi aguijón. Cuando todo un equipo rema en un mismo sentido, el del juego asociativo buscando al compañero mejor situado de forma rápida y ofreciéndose para dar soluciones al que lleva el balón, si algún jugador decide llevar otro camino, no sólo está perjudicando al equipo sino que de forma evidente se está perjudicando a si mismo. Por otro lado, y entendiendo que cuando estás ahí dentro los nervios te juegan malas pasadas, debo insistir en que debemos estar centrados en el juego, que tenemos a raudales, y sobre todo, cuando se acaba el partido, entender que nada de los que hagamos o digamos puede cambiar el resultado y sin embargo nos puede perjudicar de forma notable.