U.D. Montecarlo - 1 : C.F. Santo Domingo Juventud - 1

Se esperaba más del líder en el José Luis Violeta y puede sentirse afortunado de haber salido con un punto del encuentro, ya que en ningún momento consiguió imponerse a los la U.D. Montecarlo y sólo contra 9 y de una dudosa falta en la frontal logró su gol; el partido no fue brillante pero si tuvo la emoción, los nervios y la intensidad propios de un enfrentamiento entre los 2 primeros de la clasificación. 

Comenzó el choque en una soleada mañana y pronto se vio lo que iba a ser la tónica de la primera mitad, una fuerte presión de los locales que impedían los naranjas desplegar su juego.

Poco a poco el Montecarlo se fue sintiendo más cómodo con la situación y, aunque sin demasiadas aproximaciones a la portería rival, si se notaba que el peligro estaba más cerca de la meta del Juventud ; mediada esta primera mitad llegó el primer aviso de la delantera rojilla en un disparo de su delantero centro que salió alto por poco; minutos más tarde sería el portero visitante el que tuvo que cortar en falta fuera del área otra galopada del mismo jugador; le bastaba al Montecarlo con la presión y el buen trabajo defensivo para mantener a raya al Juventud que se mostraba inoperante en ataque, y apurado atrás, así llegó una nueva ocasión cuando tras un buen pase un delantero local consigue darse la vuelta en la frontal pero su disparo sale fuera. 

Habría que esperar hasta el último instante de esta primera mitad para que, en una galopada impresionante, el delantero centro rojillo desbordase a sus dos defensores para batir al portero visitante de un disparo ajustado al palo; era el 1-0 que hacía justicia a lo acontecido en hasta ese momento, ya que si bien el partido no tenía un dominador claro, el único peligro lo creo el equipo local que parecía tener controlada la situación, frente a un Juventud que no dio sensación de peligro alguna. 

Todo iba a cambiar en 5 fatídicos minutos; tras comenzar la segunda mitad de forma análoga a la primera, con el Montecarlo presionando sobre el área rival, en un saque de banda de los naranjas se produce una falta y el árbitro considera que es merecedora de cartulina amarilla, lo que supone la expulsión del jugador local que ya acumulaba una de la primera parte. 

Pero las desgracias nunca vienen solas y sólo un par de minutos después, una falta en la medular del cuadro rojillo supone la expulsión de un nuevo jugador local, esta vez con roja directa sin que nadie acierte a saber que ha llevado al colegiado a tomar semejante decisión. Esta medida desproporcionada del colegiado, tal vez demasiado presionado, cuando apenas se cumplía el minuto 10 de la segunda mitad iba a suponer un vuelco al devenir del partido, y a un gran reto para los chicos de la U.D. Montecarlo, defender con 9 ante el líder de la categoría. 

El Juventud, como no podía ser de otra manera comenzó a tener más el balón, pero los locales iban a dar una lección de pundonor y esfuerzo, neutralizando todos los intentos de crear peligro de los naranjas, que sólo sembraban algo de inquietud en algún lanzamiento de falta o de esquina y en algún centro aislado desde la banda izquierda. Así, llegamos a los instantes finales del encuentro, y el Montecarlo , que apenas podía salir a la contra, pudo trenzar una buena jugada por la derecha que terminó despejada por la defensa rival, y aún tuvo una buena oportunidad para cerrar el partido en una falta desde la frontal que se estrellaría en la barrera; pero no lo hizo, y en la jugada siguiente, una contra terminaría con una falta señalada por el colegiado en la frontal del área rojilla que iba a significar el empate a uno gracias a un buen lanzamiento directo.
Aún sacó fuerza de flaqueza el cuadro local e intentó con 9 desnivelar la balanza en una acometida final, pero el marcador ya no se movería. 

Duele perder dos puntos en los instantes finales, pero debe salir reforzado el cuadro de torrero que fue mejor que su rival de hoy cuando hubo igualdad en el campo y no pareció inferior cuando contó con dos jugadores menos.
La puyita de alasan: Poco o nada que objetar a los chicos en pundonor, esfuerzo y trabajo colectivo, notable empequeñeciendo a un rival que no pudo con nosotros ni con dos jugadores más. No puedo puntuar tan alto en otros aspectos como la lectura de un partido tan tenso y disputado como el de este sábado, sobre todo por ser algo que ya se ha repetido. En estas circunstancias hay que saber medir las acciones y extremar el cuidado para no dejar al equipo en inferioridad, y no voy al hecho de si las tarjetas son o no justas, que para mí al menos la roja directa no lo es, sino como y cuando se producen, en dos jugadas sobre la línea de medios y con el equipo bien posicionado, en sendas jugadas sin aparente peligro inminente. Es mucho sufrimiento el que tuvieron que soportar el resto de jugadores durante casi media hora que con un poco de cabeza se podría haber evitado, al menos en parte.  Hay que aprender a controlarse un poco más.